¿Parque o televisión?

Como todos sabemos, las nuevas tecnologías han cambiado mucho a los niños y niñas de esta generación. El ocio y el tiempo libre ya no son lo que solían ser, ya que los niños aprenden cada vez más pronto a saber usar un dispositivo móvil o una tablet, y las tecnologías están mucho más integradas en la actualidad. En la generación de sus padres, por ejemplo, nadie tenía móviles o dispositivos digitales, y el tiempo libre del que disponían lo empleaban en jugar al futbol, en estar en la calle, en divertirse con otros niños. Ahora esto se ha convertido en un problema, ya que se dan cada vez más casos de niños sedentarios, que prefieren estar encerrados en su casa viendo la televisión que saliendo a fuera a jugar con otros de su edad. Los efectos de la televisión en los niños pueden ser muy negativos. 

La televisión y las consolas ahora han adoptado un protagonismo bastante considerable entre los jóvenes, pero la preocupación debería orientarse más hacia los más pequeños, que son más influenciables que un adolescente. Los niños ahora están muy alfabetizados digitalmente, y tienen un interés por lo digital que normalmente cuesta administrar, pero tenemos que tener en cuenta que los niños necesitan un tiempo de ocio para poder desarrollarse correctamente. La televisión es uno de sus principales problemas, ya que SIEMPRE va a haber algún programa que les llame la atención o que puedan ver sin ningún problema, hay veces que los programas no nos generan un gran interés, pero aún así los vemos por no tener otra cosa mejor que hacer, y esto en los niños es un gran problema.

Aquí podemos observar un experimento sobre la influencia de la televisión en los niños más pequeños

Para evitar que estén todo el día pegados a la televisión, es necesario tirar un poco de ellos. Tenemos que tener en cuenta que normalmente ellos no querrán, porque es más cómodo estar viendo la televisión que salir a fuera, y ya no tantos niños salen a jugar o hacen cosas juntos como antes, pero los parques nunca están vacíos. En ese caso, no estaría mal hacer cosas con ellos, salir a dar un paseo, acompañarles al parque u organizar alguna actividad juntos. Esto lo pueden hacer tanto padres como madres. Aunque el trabajo es un gran impedimento, la educación de los niños merece la pena y ese esfuerzo.

Otra iniciativa que podemos tener, es establecer un horario regulado para la televisión y cumplirlo de manera estricta. En esto tenemos que tener en cuenta que muchos programas fuera de una franja horaria dejan de ser tan infantiles, y los niños podrían estar visionando programas que les afecten de maneras negativas, siempre tenemos que saber lo que están viendo los niños para evitar esta clase de cosas.

Tenemos que enseñar a los niños a saber administrar esta clase de contenidos digitales, porque siendo adultos ya tenemos conciencia para poder saber cuándo parar o hacer otra actividad, pero si un niño se aburre, es capaz de estar todo el día frente al televisor si no le damos otro medio para entretenerse. Cuando eres niño, el aburrimiento es algo muy desconocido, es muy complicado para un niño quedarse sin hacer nada, de forma que si se aburre, podemos ayudarle a encontrar un quehacer o alguna clase de actividad.

Algo bueno siempre son las actividades extraescolares, pero es un tema algo tabú. Las actividades extraescolares pueden alejar al niño de estar todo el día en el televisor, pero tiene que ser algo que le motive, porque sino lo único que conseguiremos es forzarle a algo que en realidad no le gusta y acabará odiándolo. Tampoco es bueno apuntarle a mil y una cosas que hacer, porque le saturamos completamente. Lo ideal sería conocer los gustos y aficiones del niño y apuntarle a alguna actividad relacionada, de forma que el niño quiera ir y le guste.


¿Qué opináis vosotros? ¿Qué actividades extraescolares usaríais para evitar la televisión? ¿Qué tiempo creéis que es el adecuado para visionar la televisión?

Mujeres y hombres y viceversa e ignorancia

De sobra es sabido, que la programación televisiva actual es muy variada y posee muchos contenidos entretenidos, educativos, interesantes y para toda clase de público. Pero hoy no vamos a hablar de este lado de la televisión, vamos a hablar de la telebasura, más concretamente del programa de la actualidad llamado "Mujeres y hombres y viceversa"

Para comenzar, una breve descripción de este programa. MYHYV, es un programa de citas, que actualmente está en emisión en España en Telecinco de 12:45 a 14:15h y en Divinity de 10 a 11:15, todo de lunes a viernes. Es presentado por Emma García, y su mecánica es bastante simple. El programa trata de personas sin pareja, y se divide en tronistas y pretendientes. Los tronistas suelen ser 4, dos chicos y dos chicas, y los pretendientes acuden a conquistarles y a conocerles. Al final, el tronista elige a un pretendiente en la final, eliminando a los demás.

Una vez hemos entendido el funcionamiento de este programa, no hace falta pararse a pensar mucho tiempo para darse cuenta de que es pura telebasura. Empezando por su clasificación de edad, ya que este programa está orientado para mayores de 12 años. ¿De verdad creemos que los niños y niñas de 12 años deberían aprender qué es el amor viendo esta clase de programas? Los niños de 12 años son extremadamente vulnerables e influenciables, y tenemos que plantearnos qué van a sacar en claro con esta clase de programación, que por cierto, está en horario infantil.

Aunque es cierto que pocos niños de tan bajas edades ven este programa, ya que lo suelen ver más adolescentes que niños. Esto en principio puede parecer que hace menos daño, pero ¿Qué clase de adolescentes estamos formando? Estos adolescentes, luego tendrán que salir al mundo real, donde no hay televisión o cámaras, y para entonces ya será tarde y se pensarán que la vida es un show como los que se muestran en esta clase de programas. Se creerán que es normal encontrar el amor de esta forma, tener citas de esta manera y juzgar a las personas que les quieren como carnaza, como pretendientes a los que pueden expulsar o decidir sobre ellos como quieran.

Aquí podemos ver un vídeo de cómo los jóvenes saben más de este programa que de cultura general.

La apariencia que tienen las personas en esta clase de programas tampoco es muy común que digamos. Si nos fijamos en las apariencias de las chicas y los chicos, estos promueven unos estereotipos de belleza que no son los normales en la vida real. Las chicas son todas delgadas, arregladas y maquilladas de los pies a la cabeza, guapas y perfectas, y los chicos bastante iguales. ¿Qué idea absorberán de esto los adolescentes y los niños? ¿Qué clase de gente esperan encontrarse en la vida real si viven creyendo que así es la gente "normal"?

Esta clase de programas no fomentan nada bueno entre nuestros jóvenes, y no digo que todo lo que programan en la televisión tenga que ser educativo o aportar algo directamente, pero el entretenimiento también tiene que tener cierta calidad televisiva. Asusta la idea de que nuestros adolescentes y niños se entretengan viendo esta clase de programas, donde se compite por el amor de una persona que se rige en un trono.

La figura de la presentadora, es la que peor me parece de todo el programa. Básicamente, su función es ir narrándonos todo lo que sucede en el programa y meter cizaña sobre todo lo que sucede entre los jóvenes concursantes, liar las discusiones, confundirlos y tratar de echar más leña al fuego.

En resumen, todo lo que ofrece este programa me parecen puros estereotipos y completamente repugnante, morboso y sin nada que ofrecer a la audiencia. Aquí tenemos un estudio sobre por qué gusta tanto y tiene tanta audiencia este programa, aunque ahora esté bajando (Gracias a dios). ¿Qué opináis vosotros? ¿Estáis a favor o en contra de esta clase de programación? ¿Qué otros programas os parecen telebasura?

Los diferentes contextos de la alfabetización digital

La alfabetización digital o multimedia es la capacidad para localizar, evaluar, organizar, entender y analizar información utilizando tecnología digital. Implica tanto el conocimiento de cómo trabaja la tecnología de hoy en dia como la comprensión de cómo puede ser utilizada. Las personas que están digitalmente alfabetizadas pueden comunicarse y trabajar más eficientemente, sobretodo con aquellos que poseen los mismos conocimientos y habilidades. Además de esto, cuentan con capacidades para entender el lenguaje y para poder construir procesos comunicativos que se despliegan en los entornos digitales. Este alfabetismo digital incluye el conocimiento del hardware de los ordenadores, del software, de internet, de los móviles y de otros dispositivos digitales.

Aquí tenemos un vídeo en el que nos explican de una manera más extendida la alfabetización digital.

Este desarrollo tecnológico provoca transformaciones en diferentes contextos sociales:

En el trabajo, la alfabetización digital ofrece más posibilidades de obtener seguridad económica. Muchos trabajos requieren un conocimiento laboral de los ordenadores y de internet para efectuar funciones básicas. En la medida en que la tecnología inalámbrica se perfecciona, más trabajos requieren conocimientos sobre móviles, PDAs y demás. Como la tecnología se ha tornado más barata y accesible, más trabajadores están necesitando del alfabetismo digital. Al resto de trabajadores que ya saben usar fácilmente ordenadores y dispositivos móviles, se aplican pruebas de alfabetización digital para contratar y ascender laboralmente en medida de sus conocimientos.

La alfabetización en el ámbito educativo es un reto orientado a la formación de ciudadanos críticos que sean capaces de vivir en una sociedad de información en constante crecimiento y actualización. Los centros educativos están continuamente actualizando sus planes de estudios para mantenerse al día con acelerados desarrollos tecnológicos, pero es una carrera contra el tiempo. Esto a menudo incluye ordenadores en las aulas, utilización de software para exponer planes de estudio y materiales de estudio disponibles on-line para los alumnos. Algunas aulas están ya diseñadas para utilizar pizarras digitales interactivas y dispositivos de respuesta de la audiencia. Estos son muy efectivos siempre que los profesores estén también digitalmente alfabetizados.

Los profesores habitualmente imparten enseñanzas de alfabetismo digital proporcionando a estudiantes que utilizan las tecnologías las competencias y conocimientos necesarios para comprender y beneficiarse de la sociedad de la información en la que viven actualmente. Estas enseñanzas incluyen la habilidad para verificar la existencia de fuentes creibles en la red y para citar los espacios web. A menudo se requiere que los educadores tengan certificados de alfabetismo digital para enseñar cierto software y sobre todo para prevenir el plagio entre los estudiantes mediante determinados programas.

La importancia de las tecnologías de la información y comunicación para la enseñanza y el aprendizaje es ampliamente reconocida. A nivel global, el uso de las TIC en el ámbito educativo está asociado con las llamadas “habilidades del siglo XXI” las cuales consisten en desarrollar el pensamiento creativo y crítico, la resolución de problemas, la comunicación y la colaboración. Se espera que los estudiantes adquieran dichas habilidades para integrarlas en la vida personal y laboral.

En la sociedad, el alfabetismo digital ayuda a la gente a comunicarse y mantenerse al día de las tendencias sociales. El alfabetismo en las redes sociales y en sitios web 2.0 ayuda a la gente a mantenerse en contacto con otros, transmitir información en el momento adecuado y hasta ayudar a la venta de bienes y servicios. Esto está muy difundido entre las generaciones más jóvenes, aunque las generaciones más antiguas parece que tienen más dificultades para alfabetizarse digitalmente. La alfabetización digital puede ser un factor de inclusión social, como podemos ver aquí.

¿Qué opináis vosotros? ¿Se os ocurre otro contexto en el que se pueda utilizar la alfabetización digital?

Los inicios y el futuro de la Web 2.0

Para que nos adentremos un poco más en la Web 2.0, primero tenemos que definir qué es la "Web", ese término tan amplio y en estos momentos tan actual. La Web nació de Tim Beners-Lee, que en los primeros pasos de la web, esta solo era un ordenador encendido todo el día, de forma que las personas podían entrar en cualquier momento y descargar imágenes o textos, y esto se convirtió en lo que ahora conocemos por servidores. En 2001 salió a bolsa con el nombre de Web 1.0, y con un concepto bastante simple: Cualquiera podía publicar datos y cualquiera podía descargarlos, siempre que se tuviese un ordenador y línea disponible. Pasó a ser Web 2.0 gracias al mapa conceptual de Markus Angermeier.  . La diferencia entre la Web 1.0 y 2.0 puede ser observada con más detenimiento aquí.

La web 2.0 es tan difusa, cambiante e inestable, que es un tanto complicado definirla de forma concreta, pero podemos caracterizarla por sus distintas particularidades.

La web 2.0 se caracteriza por ser una plataforma de servicios software, llena de transformaciones y mezclas de datos, así como de las fuentes de donde provienen. Los softwares no son atados a un único dispositivo, de forma que se aprovecha la colectividad y la participación de los demás usuarios.

Esta Web, tiene seis grandes parámetros o dimensiones, que se entrecruzan y se desarrollan de forma paralela. Estos seis parámetros engloban las redes sociales, los entornos virtuales interactivos, la comunicación multimedia y audiovisual, las compras de mercado, la amplia gama de información y datos, y la fragmentación de la cultura a modo de puzzle. Estas seis características asocian en cierto modo a la web con lugares de encuentro como una plaza, un mercado o una biblioteca, para escenificar la toma y el cambio de información.

Aquí se muestra un vídeo explicativo donde se muestra de una forma más sencilla la Web 2.0

La Web como biblioteca universal es una paradoja en sí misma, ya que disponemos de los recursos y medios para acceder a toda la información disponible, pero la mente humana tiene un límite de capacidad, y esto produce que se vea sobrepasada por la excesiva cantidad de información que recibimos. Esto es lo que se conoce como "infoxicación", que hace referencia a la sobreabundancia de información que es difundida a gran escala por los medios y tecnologías. Por ello, se afirma que una sociedad con más información no significa más conocimiento, ya que carecemos de la capacidad de interpretarlos muchas veces. Habría que saber emplear la información, transformar los datos en conocimiento para poder darle un buen uso a la información proporcionada.

La Web como mercado, donde la información es la materia prima de la nueva economía. Muchos sectores económicos utilizan las compras online, la gestión de servicios con comunicación vía internet... Las industrias de la información y de servicios on-line ahora son sectores estratégicos en la producción y en las transacciones económicas. Por ello, las empresas comienzan a contratar personas que posean competencias adecuadas para poder tratar con este tipo de transacciones de información on-line. A causa de todo esto, la alfabetización digital es ahora una formación importante de los trabajadores de la industria digital y de los ciudadanos como consumidores.

La Web como ágora pública de comunicación hace referencia a las redes sociales. Esta nos permite estar en contacto permanente con muchos otros usuarios y llegar a construir comunidades o grupos de comunicación. Esto tiene un peligro, ya que cualquier persona puede interactuar contigo y compartir información de manera muy sencilla. También tiene miles de factores positivos, como utilidades profesionales, alternativas de aprendizaje, generar fenómenos de movilización y demás. De esta forma, volvemos a hablar de la alfabetización, para poder hacer un buen uso de las redes sociales y de la comunicación y que se forme a los sujetos para que haya conciencia de lo que debe ser público o privado. 

Aquí podemos observar un cortometraje de las redes sociales y su impacto en la sociedad actual.

¿Qué opináis vosotros? ¿Creéis que las redes sociales absorben tanto como vemos en el vídeo, o que tal vez es algo más sutil? 

El amplio y peligroso mar de la realidad virtual

La realidad virtual es un fenómeno bastante innovador y nuevo, que forma solo una pequeña parte de la intrincada malla de herramientas y facilidades que existen hoy en dia que favorecen la comunicacion y la cultura, ademas de muchos otros aspectos. Pero para poder meternos de lleno en la realidad virtual y poder llegar a un debate sobre su funcionalidad, primero tenemos que definir la cultura digital... Así que, ¿Qué es la cultura digital?

Entendemos cultura digital como el conjunto de procesos socio-culturales derivados de un contexto emergente en el que las tecnologías digitales son centrales. La cultura digital da pie a “un conjunto de valores, prácticas y expectativas acerca de la manera en que las personas se comportan e interactúan en la sociedad red” (Deuze, 2006).  El proceso de culturalización digital se ha extendido a lo largo de muchos años, ya que, aunque parezca que toda la comunicación e información están en su momento de máximo esplendor, ha sido un largo camino el llegar hasta aquí. Desde las pinturas rupestres, pasando por la imprenta y el primer ordenador, nos encontramos en un momento en el que la comunicación y la tecnología parece que no tienen fin. Siempre sacan un modelo de móvil más actualizado, un aparato más innovador, algún sistema revolucionario... Y esto nos hace plantearnos, ¿Hasta dónde va a llegar?

Aquí entra en juego una de las últimas revoluciones del mundo de los videojuegos y del 3d: La realidad virtual. Para comenzar,¿Qué es la realidad virtual? Bueno, la realidad virtual se refiere a un entorno generado mediante tecnología informática, que crea en el usuario la sensación de estar inmerso en otra realidad diferente. Esto quiere decir, básicamente, que nos trasladamos a otra realidad que no es la nuestra, ya puede ser un océano, una montaña, el espacio... todo lo que puedas imaginar, con el factor de que no es real, pero el objetivo es obtener la mayor sensación de realismo posible. El problema es, que esta realidad, cada vez se hace más y más realista, y ha salido a tema de debate, ya que mucha gente opina que nos estamos sumergiendo demasiado en lo virtual. 

Aquí puedes ver de lo que sería una experiencia virtual (Sin el factor 4d, obviamente) de un viaje al centro de la tierra:

La realidad virtual es una moneda con dos caras. En una de las caras, tenemos la amplia gama de factores positivos que tiene la realidad virtual. El más destacable, evidentemente, es la inmersión en otros mundos que te puede facilitar. Gracias a la realidad virtual nos podemos sumergir en un océano, en un barco hundido, en una jungla, en una montaña rusa, en cualquier cosa que se nos ocurra. Podemos acercarnos a experimentar sensaciones y experiencias que jamás habríamos imaginado vivir, pero con el "pequeño" detalle de que esto no es real. Se podría mirar desde un punto más positivo diciendo que bueno, al menos podemos acercarnos lo máximo posible a esa experiencia, pero el contra-argumento sería.. "¿De qué vale acercarse lo máximo posible, si no deja de ser una ilusión?" Aquí obviamos los daños visuales que pueden producir las gafas de realidad virtual, los cuales se pueden leer con más detenimiento aquí. 

La realidad virtual no deja de ser eso, una fantasía, una ilusión, una cortina de humo que intenta acercarse a la realidad lo máximo posible, pero a la vez nos aleja a nosotros de ella. ¿Existe la remota posibilidad de que nos sumerjamos tanto en la realidad virtual que podamos olvidarnos de la realidad real? Cada vez más jugadores aficionados se atrincheran en sus casas experimentando la realidad virtual en lugar de salir al mar, por ejemplo, y sumergirse en un verdadero océano. Es cierto que hay cosas que no se pueden experimentar en la realidad, porque son lógicamente imposibles, pero mi punto es que, aunque poseamos los medios para evadirnos en una realidad alternativa, no nos olvidemos de que existe nuestra propia realidad, a la que pertenecemos.

En conclusión, las nuevas tecnologías que se actualizan continuamente en nuestros alrededores tienen lados positivos, y evidentemente cada vez son más realistas, más inmersivas, más detalladas y futuristas, pero debemos saber equilibrar esto con nuestra propia realidad. Si nos sumergimos tan profundamente en una realidad alternativa, corremos el riesgo de olvidarnos de que existe una realidad distinta que es la verdadera, con sus propias experiencias y vivencias, y no podemos evadirnos de tal modo que nos olvidemos de ellas. 

¿Qué opináis vosotros? ¿Creéis que la realidad virtual es excesiva, o por el contrario que es un avance importante y necesario?